Entre las autoridades salientes están los titulares de Defensa, Justicia y Relaciones Exteriores a pocos días de los cambios en Salud.
La jornada de este lunes el Gobierno del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, vio la salida de seis ministros, incluidos los de Justicia, Relaciones Exteriores y Defensa, apenas días después de que fuera reemplazado el titular de Salud en plena pandemia de COVID-19.
Las salidas de estos ministros fue confirmada oficialmente por el Gobierno, que también dio cuenta de otro relevo en la cartera de Justicia, ya que su titular pasa a encabezar la Abogacía General del Estado tras otra renuncia en el equipo presidencial.
Aunque el ministro de Asuntos Exteriores, Ernesto Araújo, dejó claro que había presentado su renuncia, el ministro de Defensa, Azevedo e Silva, solo se despidió del puesto con una nota oficial en la que no aclaró si era renuncia o destitución, pero en la que subrayó su «lealtad» con Bolsonaro mientras estuvo en el cargo, período en el que dijo haber «preservado a las Fuerzas Armadas como instituciones del Estado».
Tanto Araújo como Azevedo e Silva entraron al Gobierno junto con Bolsonaro, el 1 de enero de 2019, el primero como un diplomático muy identificado con la ultraderecha del gobernante y el segundo con unas Fuerzas Armadas más institucionales y ajenas a las ideologías.
Ambas bajas en el Gobierno siguen a la sustitución del general Eduardo Pazuello como ministro de Salud, reemplazado por el cardiólogo Marcelo Queiroga en medio de una aceleración de la crisis sanitaria causada por el COVID-19, que ya ha matado a más de 312.000 personas en el país.
En el caso de Pazuello, el tercer ministro de Salud que tuvo el Gobierno de Bolsonaro desde la irrupción de la pandemia en el país en febrero del año pasado, su salida fue producto de unas fuertes presiones de la derecha más moderada, crítica de su errática gestión de la crisis sanitaria, que hasta está bajo investigación judicial.
Las razones para la salida de Araújo son similares, mientras que el caso del general Azevedo e Silva no está claro y su salida del Gobierno está cercada de misterio, al punto de que no se confirma si dimitió o le fue exigida la renuncia.
Fuente: 24horas.cl