¿A quién pertenece tu cara? Por supuesto, una pregunta tonta… ¿verdad?
¿Pero qué pasa con los datos generados a partir de tu cara? ¿Y qué significa que tu cara se convierta en datos?
Ya existen muchos datos sobre millones de caras. Hemos ofrecido nuestros rostros en las redes sociales y en las fotos almacenadas en la nube.
Pero aún no hemos determinado a quién pertenecen los datos asociados a los contornos de nuestros rostros.