Su aprobación fue hace un mes atrás y ahora, el Presidente de la República, Sebastián Piñera, promulgó la Ley de Eficiencia Energética, que establece como política todas las acciones orientadas a una buena gestión de la energía. Lo anterior, fue destacado y precisado por el Intendente del Maule, Juan Eduardo Prieto, quien valoró su decreto para avanzar en la materia desde hogares y sectores productivos.

Entre sus principales acciones, la ley establece que los grandes consumidores de energía deban implementar sistemas de gestión de la energía e informar sus consumos energéticos al Ministerio de Energía. De igual forma, se exigirán nuevos estándares de eficiencia energética para el parque vehicular que se comercialice en Chile, promoviendo de manera concreta la electromovilidad.

“Esta promulgación que realizó el Presidente Sebastián Piñera es una gran noticia por muchas razones. La primera, que nos ayudará en la meta de carbono neutralidad al año 2050. La segunda, que hace de la eficiencia energética una política del Estado y por último y no menos importante, que será un gran aporte para nuestras familias maulinas y los sectores productivos” dijo el intendente Prieto.

CIFRAS

Es de resaltar, que otro de los puntos relevantes del paquete normativo, es que a raíz del mismo, las viviendas nuevas tendrán un etiquetado similar al que tienen los electrodomésticos. Así entonces, la ciudadanía podrá elegir una vivienda de manera más informada y eficiente.

“Un dato importante es que, actualmente hasta el 13% del presupuesto de una familia vulnerable promedio se destina a cubrir las necesidades energéticas de sus hogares. Ahora, en el área productiva los costos para compra de combustibles y electricidad puede superar el 15% del presupuesto total de dichas industrias. Por eso valoramos este gran paso para cuidar nuestro medio ambiente y fortalecer economías familiares y productivas” informó la máxima autoridad regional.

También las medidas permitirán una reducción de la intensidad energética en Chile del 10%, al año 2030, un ahorro acumulado de US$15.200 millones y una reducción de 28,6 millones de toneladas de CO2. Esto equivale al recorrido anual de 15,8 millones de vehículos livianos o a la absorción anual de 1,8 millones de hectáreas de bosque nativo.